En un partido que se juega de local contra Chile (Perdón ? Contra quién ????), donde para crear una situación de gol tenés menos claridad que el castellano de Tévez, hay que ser muy caradura para salir a boquear.
Con esa selección de enanitos endiablados que hacen gambetas en la mitad de la cancha, sólo podemos aspirar a salir segundos otra vez en las eliminatorias y date por contento.
Riquelme 2 golazos de tiro libre. Sí, dos golazos. Pero acordate que contra Chile: callate de nuevo.