*También postado en Amancebados
A continuación leeremos un cuentito y realizaremos un jueguito tipo "rol" en el que vas a elegir tu propio personaje, a tu propio gusto, el que más te guste, con el que te sientas mas identificado.
CUENTITO
Había una vez un barrio en un pueblito, donde todo era paz, donde todo era muy lindo.
En ese barrio había un grupo enorme de amiguitos, todos muy unidos. Pero había un inconveniente, eran "demasiados" amigos y casi nunca se organizaban para hacer sus actividades, desde armar los grupos para los juegos, para los deportes, para juntar plata para hacer una comilona con pizzas, dulces y gaseosas y para hacer los bailes que siempre se organizaban en ese barrio, que por cierto eran bailes muy famosos porque iban casi todos los chicos del pueblo.
Entonces decidieron organizarse mejor, eligiendo entre todos a un "encargado", que tendría la misión de organizar los juegos, organizar los diferentes campeonatos de los tantos deportes que allí se practicaban. Al mismo tiempo juntaría el dinero para comprar todo lo necesario para las actividades como para las comilonas y también para las fiestas y los bailes.
Muy bien, ya era todo mas organizado. El encargdo llamado de Juancito ya tenía TODO en sus manos y todo comenzó a funcionar mejor.
Pasó el tiempo, bastante tiempo ya desde que se habían organizado de esa forma. Juancito le empezó a gustar estar en esa posición y muchas veces empezó a quedarse con muchos vueltitos. Esos vueltitos comenzaron a ser cada vez mas grandes, y mas y mas.
El resto de los amiguitos se empezaba a preocupar, porque veían que ponían platita pero ya no alcanzaba para las actividades. Y nadie entendía lo que sucedía.
A Juancito le empezó a gustar tanto la platita que se quedaba para él, hasta que aumentó "su parte" a un 90%, dejando el 10% de lo recaudado para las actividades.
Como Juancito ya tenía muchísima platita juntada para sí, empezó a llamar a sus íntimos (algunos pocos, Pedrito, Pablito y Luisito, quienes eran muy fortachones) para hacer sus propias fiestas privadas.
El resto de los amiguitos del pueblo al notar estas "fiestas que se hacían aparte" empezaron a sospechar. Algunos hasta se preguntaban: "Será que Juancito se queda con algo de lo recaudado ?".
Rodolfito un día fue a plantearle el problema a Juancito, y éste se ofendió tanto por las osadía que mandó a Pedrito a cagarlo bien a trompadas al pobre de Rodolfito.
Pobre Rodolfito ! quedó hecho pomada... y esto era una lección para el resto.
Pasó el tiempo y Juancito (junto con sus íntimos) eran cada vez mas hijos de puta. A parte de todo eso el poder era legítimo !!! SI AL FINAL LO HABÍAN ELEGIDO !!!!!
Todos los ninõs del pueblo ya no sabían qué hacer, hasta que a uno se le ocurrió una idea: "Chicos, chicos !!! por qué no llamamos a Los Ninjas ?" Los Ninjas eran unos hermanos, 7 en total, hijos del japonés dueño de la tintorería del pueblo. Eran famosos porque eran todos karatecas y buenos de "piña".
Los Ninjas estaban en su casa, practicando karate entre ellos. Eran un grupo de gente extraña, sin dudas, no tan sociables.
Fue así como al final todos los chicos del pueblo fueron a golpear la puerta de la casa de Los Ninjas, y les plantearon el problema: "Y qué quieren que hagamos ?" preguntaron Los Ninjas. "Que los caguen a patadas en el culo a ese Juancito, Pedrito, Pablito y Luisito. Y que los rajen a la mierda de la administración de nuestra plata".
Los Ninjas, debatieron entre ellos qué es lo que debían hacer, y les preguntaron: "Pero ustedes no eligieron a Juancito ?" "Sí", respondieron todos. "Pero ese Juancito se fue al carajo, y ya no sabemos cómo retomar la administración de nuestra platita y poner orden entre los chicos del pueblo. Cada vez que alguien les plantea algo, nos gritan y nos sacan cagando. Si insistimos nos cagan a trompadas, son fortachones, y no tenemos medios para sacarles el poder", Agregaron los chicos del pueblo.
Los Ninjas por fin tomaron una decisión: "Está bien, vamos a intervenir y los sacaremos por la fuerza. Pero con una condición: Ahora nosotros asumimos la administración de todo". La respuesta de los chicos del pueblo no se hizo esperar: "Sí, por supuesto, lo que quieran, pero por favor, háganlo yá!!!"
Dicho y hecho:
Los Ninjas, aparecieron con sus estrellitas, palitos y toda la parafernalia ninja, en el momento que Juancito y sus malvados amigos contaban el dinero mal habido, y les dieron una golpiza que difícilmente alguien olvidaría alguna vez.
El poder ya era de los Ninjas.
Los "VIVAS" a los ninjas que los ninõs del pueblo daban diariamente se hicieron escuchar en el pueblo por muchísimo tiempo.
Pero la historia no termina ahí, pasado un tiempo, Los Ninjas no sólo tomaron el poder, también tenían el mismo mal hábito que sus antecesores y aún peor, eran mucho, pero mucho mas violentos. Se tornaron rápidamente en flor de hijos de puta.
Debido a esa violencia que los Ninjas ejercían sobre los niños del pueblo, muchas familias decidieron mudarse de pueblo, para no tener que enterarse que alguien malvado le había hecho mucho daño a su hijito.
No es la idea de este cuento describir cosas feas, pero para serles honesto, se dijo que Los Ninjas asesinaron a muchos niños. Pero poco se sabe sobre eso.
Fue una época muy oscura en la vida del pueblo, tal vez la mas fea que se haya conocido en toda su historia, hasta ahora.
Pero los chicos del pueblo, organizados y decididos, resistieron y resistieron las violencias a las que eran sometidos. Los Ninjas eran cada vez mas odiados. hasta que como el efecto de la gota sobre la piedra. Los Ninjas entendieron que nunca iban a ser aceptados por los chicos y la resistencia iba a ser eterna.
Al final, tras muchas conversaciones con nuevos representanres de los chicos del pueblo, decidieron (despues de volverse muy ricos y despojarlos de casi todo) entregarles el poder de vuelta.
Los niños del pueblo por fin reencontraban la administración de las cosas del pueblo.
Y fue así, como cada año, al conmemorar aquel feo día en el que recuerdan que los malvados Ninjas tomaban el poder, los mismos niños que fueron a golpear la puerta de la tintorería, hoy se reúnen para recordar aquel día negro mientras dicen: "Qué malvados Ninjas hijos de puta!".
Sí. Esos mismos niños.
FIN